A veces, la débil luz de una vela, ilumina una oscura habitación.
A veces, su cálida luz, no necesita palabras para poder expresarse.
A veces, su suave resplandor transmuta la conciencia.
A veces, solo a veces, ocurre el milagro. Cuando su mirada y la mía se hacen Una.
A veces, su cálida luz, no necesita palabras para poder expresarse.
A veces, su suave resplandor transmuta la conciencia.
A veces, solo a veces, ocurre el milagro. Cuando su mirada y la mía se hacen Una.
1 comentario:
Si todo eso pasa a veces, merece la pena "todo".
Besicos muchos.
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